Es importante darnos cuenta que, contrariamente a lo que pensamos, cuando sobreprotegemos a nuestros hijos no les estamos ayudando; les estamos privando de la oportunidad de equivocarse, de desarrollar sus propios recursos y de descubrir su propio camino. ¿Puede ser beneficiosa la frustración? ¿Cómo podemos ayudar a nuestros hijos? ¿A qué edad debemos poner normas y límites? María Jesús Álava Reyes nos da las claves para #AprendemosJuntos #BBVA